6 de junio de 2006
Hoy es un día donde la fecha el mes y el año conjugan 666, un número cabalístico comúnmente atribuido al anticristo, el señor del mal, etc. Yo no soy supersticiosa - creo que en algún momento lo he dejado claro- pero de que vuelan, vuelan. En el momento de dejar este registro no era de mi conocimiento ningún hecho sobrenatural, o inexplicable; acá en Caracas ha sido un día nublado, lluvioso y si se quiere triste... Lo que sí me parece curioso es que este año también se registró una fecha "especial" el mes pasado cuando, por un segundo -obviamente- el reloj marcó la hora 01:02:03 del 04/05/06, dando una secuencia perfecta de números. Cabe destacar que el 04/05 fue en países como el nuestro que para el calendario se usa primero la fecha y luego el mes, mientras que para el resto (como Estados Unidos) fue el 5 de abril.
En lo perosnal, la importancia de este día la determina el hecho de que un día como hoy, hace dos años, regresaba a Upata, después de mi retorno de Madrid para hacerme cargo de La Fontana D´Orazio con mamá y Levin, mientras papá cumplía un reposo médico. De allá para acá muchas cosas han cambiado pero ¡ aquí estamos y aquí seguimos!.
¡Feliz tarde!
En lo perosnal, la importancia de este día la determina el hecho de que un día como hoy, hace dos años, regresaba a Upata, después de mi retorno de Madrid para hacerme cargo de La Fontana D´Orazio con mamá y Levin, mientras papá cumplía un reposo médico. De allá para acá muchas cosas han cambiado pero ¡ aquí estamos y aquí seguimos!.
¡Feliz tarde!
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